Oaxaca de Juárez, Oax.
IEEPCO

Comunicados

Discurso del Consejero Electoral Víctor Leonel Juan Martínez, en la Sesión Especial de cómputo de la circunscripción plurinominal

‹ 16 / 07 / 2013 ›

El pasado domingo 7 de julio con la concurrencia a las urnas de más de un millón 360 mil oaxaqueños y oaxaqueñas, se dieron los comicios más competidos en la historia local, para elegir a quienes ocuparán los 42 escaños en la legislatura local y los ayuntamientos en 153 municipios que se rigen por partidos políticos. A lo largo de este proceso se presentaronsituaciones inéditas. Una nueva normatividad nos permitió contar avances sustanciales para un mejor desempeño institucional: se dotaron de nuevas atribuciones y responsabilidades al órgano electoral; nuevas obligaciones a los partidos políticos; nuevos mecanismos de participación ciudadana; mayor transparencia en la actuación institucional.

A la par este Consejo General, que enfrentó su primera elección, mostró voluntad para empujar cambios. Ahora hay mayor transparencia; las decisiones son colegiadas y en esta sala hemos debatido y dado muestras de que avanzamos con coincidencias, y argumentamos en las diferencias; pero siempre comprometidos con los valores institucionales y nuestros principios rectores.

Es de destacar que en se contaron con nuevas herramientas normativas y un compromiso institucional que permitieron avances sustanciales: la sustanciación de quejas; las normas en materia de género, que obligaron a los partidos políticos a postular a mujeres a cargos de elección popular; los procesos de selección de los integrantes de consejos municipales y distritales; la publicidad de los acuerdos del órgano electoral en el portal de internet; el Programa de Resultados Preliminares (PREP), en que se pudo consultar hasta la copia del acta de casilla; el recuento total de votos, entre otras. Cierto, seguramente hay insuficiencias y podrán haberse cometido errores, que fueron y serán subsanados y, si hay irregularidades, éstas tendrán que ser castigadas.

El 7 de julio, nos mostró a un Oaxaca responsable,plural, diverso, movilizado. Los resultados, nos dieron una lección cívica y apuntalaron la pluralidad en Oaxaca. Mostraron también una competencia cada vez más equilibrada entre los partidos políticos. Tan sólo un dato. De los 25 distritos, en 5 la diferencia fue menor a un punto porcentual; en la historia oaxaqueñas sólo se habían presentado márgenes tan cerrados en un distrito en 2004 y 2007 y en 2010 en tres. Ahora esta situación se dio en Pinotepa Nacional,Juxtlahuaca,Miahuatlán,Teotitlán y Tuxtepec. Lo cerrado de la contienda marcará un derrotero en las formas de hacer política y acercarse a la ciudadanía. Los partidos políticos deberán de abrevar de las enseñanzas que deja el proceso.

Un instrumento novedoso es el recuento voto por voto. En este consejo hubo siempre un total acuerdo en que constituye un importante avance contar con esta herramienta normativa, pues abona a la transparencia y certeza en el resultado de las elecciones y otorga legitimidad al candidato triunfador, alejando cualquier duda o sospecha de posibles errores o irregularidades que se pudiesen haber cometido en la jornada electoral. Y para ello, la Legislatura oaxaqueña estableció reglas claras, requisitos y fases que habrán de cumplirse para que el contar voto por voto proceda. El Consejo General fue cuidadoso en velar porque se cumplieran esos principios que darían certeza jurídica a la aplicación normativa.

En el caso de los comicios a diputados, el recuento voto por voto se dio en los distritos de Miahuatlán, Pinotepa Nacional, Teotitlán de Flores Magón y Tuxtepec. En lo que respecta a Juxtlahuaca, con una diferencia de 46 votos, no se dio el recuento y, ante las versiones encontradas sobre los motivos, exigí y estaré pendiente de ello, una investigación puntual al respecto para el deslinde de responsabilidades correspondientes; al igual que en el caso de Pinotepa Nacional, en donde de acuerdo a lo informado por el consejo Distrital, fueron intimidados y violentados por un grupo al fin al candidato presuntamente ganador para que le entregaran la constancia de mayoría.

Pero, hay que señalarlo también, mientras el 7 de julio se diera un ejercicio ciudadano impecable y una muestra de espíritu democrático de muchos de los candidatos que aceptaron su derrota o buscarán por las vías institucionales procesar sus inconformidades; ese mismo día y durante la semana, se presentaron hechos que constituyen la antítesis de la democracia: desde la violencia física, la quema de papelería electoral, el bloqueo y hostigamiento contra las autoridades electorales, hasta la descalificación infundada, la diatriba y la propagación de falacias, verdades a medias, o mentiras para pugnarpor intereses facciosos que fueron propaladas por actores y dirigentes de partidos políticos; alejados del espíritu democrático que dicen defender.

Es totalmente condenable el ejercicio de la violencia de diversos grupos que pusieron en riesgo la integridad física de quienes participaron como autoridades electorales, de su militancia misma, de los representantes partidarios; no es con la violencia como se ganan las elecciones. Las diferencias se dirimen en la contienda con argumentos y propuestas; las inconformidades por los canales institucionales; si hubo errores o irregularidades en la actuación del órgano electoral, hay vías para denunciarlas y procesarlas, nosotros mismos estamos atentos para deslindar y fincar las responsabilidades correspondientes.

Apostar a la violencia, es cancelar la posibilidad democrática y, manifiesta que lo que se busca es el poder por el poder, no al servicio de la sociedad. Por eso repudiamos la violencia y exigimos a los partidos políticos conminen a su militancia a cesar este tipo de actos; al tiempo exigimos a las autoridades competentes el castigo a los actos de vandalismo presentados.

La participación ciudadana el 7 de julio es la más alta en comicios municipales y de diputados. En las elecciones intermedias a diputados la media era del 35 por ciento; en este año ha superado el 50 por ciento. En las elecciones municipales, el promedio histórico se sitúa en 55 por ciento; ahora superó el 58 por ciento.

Responder a la confianza ciudadana es responsabilidad de los candidatos ganadores, desde el Congreso y los ayuntamiento,  pero también de quienes no alcanzaron los votos necesarios para el triunfo actuando con responsabilidad; de los partidos políticos; y de las instituciones.

Desde el órgano electoral habremos de hacer un balance autocrítico de este proceso, ajustar lo que no funcionó en la parte operativa y aprender las lecciones positivas y negativas que nos dio.

Si bien el pueblo es la fuente de todo poder democrático, las elecciones no garantizan que un gobierno esté al servicio del interés general, ni que vaya a estarlo en el fututo. Por tanto, el veredicto de las urnas no puede ser el único parámetro de la legitimidad de los gobiernos y por ello a la ciudadanía corresponde continuar con su participación informada, crítica y vigilante, y a nosotros desde el IEEPCO nos corresponde el alto honor y responsabilidad de continuar con un trabajo incesante, arduo, que aprenda de las lecciones, sólo de esta forma podremos construir la Oaxaca democrática que necesitamos.


15/07/2013